Ver. 24. El Señor hará que la lluvia de tu tierra sea polvo y polvo - Houbigant da esto, el Señor dará a tu tierra, en lugar de lluvia, polvo y arena, que caerán del cielo sobre ti, etc. Es decir, debido a la larga sequía, el polvo, levantado por el viento, caerá en forma de aguaceros, en lugar de lluvia.

Las terribles consecuencias de este fenómeno las relata así un autor que ha viajado hacia el este: "Estos chubascos secos molestan mucho a todos los que caen sobre ellos, llenando sus ojos, oídos, fosas nasales y son suficientes para privarlos de la vista. " Ver Thevenot, parte 1: libro 2 cap. 80.

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