Él ha cerrado. - Sigue otra figura más de miseria sin recursos. Un enorme muro de piedra cruza el camino del doliente. Cuando se desvía por caminos secundarios, éstos se vuelven y se retuercen en una confusión laberíntica, y no conducen a ninguna parte.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad