Hechos 4:6

Verso Hechos 4:6. Anás... Aunque este hombre no estaba ahora en el cargo de sumo sacerdote, sin embargo lo había poseído durante once años, llevó el título toda su vida y tuvo el honor de ver a cinco de sus hijos ocupar ese eminente lugar después de él, un honor que nunca le correspondió a ninguna otra persona desde el comienzo de la institución mosaica. Es el mismo que es llamado Ananus por Josefo, Ant. b. xx. c. 8.

Y Caifás... Era yerno de Anás, Juan 18:13, era ahora sumo sacerdote, y el mismo que, poco antes, condenó a Cristo a ser crucificado.

Y Juan... El Dr. Lightfoot conjetura, con gran probabilidad, que se trata de Jochanan ben Zaccai, que era muy famoso en aquel tiempo en la nación judía. De él se dice en el Talmud, Jucas. fol. 60: "El rabino Jochanan ben Zaccai el sacerdote vivió 120 años. Encontró el favor de los ojos del César, de quien obtuvo Jafneh. Cuando murió, la gloria de la sabiduría cesó". El siguiente es un pasaje notable: Yoma, fol. 39: Cuarenta años antes de la destrucción de la ciudad, (la misma época de la que ahora habla San Lucas), cuando las puertas del templo se abrieron de golpe, Rab. Jochanan ben Zaccai dijo: "¡Oh, templo, templo! Conozco tu fin, que serás destruido, pues así lo ha dicho el profeta Zacarías sobre ti: abre tus puertas, oh Líbano, para que el fuego devore tus cedros". Ver Lightfoot y Schoettgen.

Y Alejandro... Probablemente se trataba de Alejandro Lisímaco, uno de los judíos más ricos de su tiempo, que hacía grandes regalos al templo y era muy estimado por el rey Agripa. Véase Calmet. Era hermano del famoso Filón Judaico, y padre de Alejandro Tiberio, que se casó con Berenice, la hija de Agripa el viejo, y fue gobernador de Judea después de Cuspio Fadus. Véase Josefo, Ant. l. xix. c. 5, s. 1.

De la familia del sumo sacerdote... O más bien, como lo traduce el P. Pearce, "de la raza de los sumos sacerdotes, es decir, de la familia de la que eran elegidos los sumos sacerdotes". Sin embargo, puede abarcar a los que pertenecían a las familias de Anás y Caifás, y a todos los que estaban relacionados con la familia sacerdotal. Lucas menciona claramente a todos ellos, para mostrar cuán formidables eran los enemigos contra los que tenía que luchar la naciente Iglesia de Cristo.