Si se consulta el mapa que apunta a la situación de Canaán, parecerá que desde Egipto, el camino directo era desde la parte norte de Egipto hasta la parte sur de Canaán, y este era un camino corto de no más de una semana de viaje. Pero luego los filisteos, un pueblo belicoso, ocuparon la tierra intermedia. Por lo tanto, el Señor hizo que la gente tomara un camino largo y tortuoso. Ver Salmo 107:1 . Además de la sabiduría de esto, también había mucha misericordia. Egipto iba a ser destruido. Ver Éxodo 9:15 . Y por lo tanto, el Mar Rojo debía convertirse en puerto de seguridad para Israel y la tumba de Egipto. Ver Éxodo 14:3 .

Tampoco esto fue todo. Israel iba a ser probado por un estado desierto antes de entrar en la tierra prometida. Ver Deuteronomio 8:2 ; Éxodo 3:12 .

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