• 1 Samuel 20:17

    Jonatán hizo jurar de nuevo a David, a causa de su amor por él; porque lo amaba con toda su alma.

  • 1 Samuel 20:18

    Luego le dijo Jonatán: — Mañana es luna nueva, y tú serás echado de menos, porque tu asiento quedará vacío.

  • 1 Samuel 20:19

    Al tercer día descenderás rápidamente y vendrás al lugar donde estabas escondido cuando empezó este problema. Esperarás junto a aquella piedra.

  • 1 Samuel 20:20

    Yo tiraré tres flechas en esa dirección, simulando tirar al blanco.

  • 1 Samuel 20:21

    Y he aquí que enviaré al muchacho diciéndole: “¡Ve y busca las flechas!”. Si digo al muchacho: “¡He aquí, las flechas están más acá de ti; tómalas!”, tú vendrás; porque hay paz y no hay peligro. ¡Vive el SEÑOR!

  • 1 Samuel 20:22

    Pero si yo digo al muchacho: “¡He allí, las flechas están más allá de ti!”, vete; porque el SEÑOR te manda.

  • 1 Samuel 20:23

    Y en cuanto a las palabras que tú y yo hemos hablado, he aquí que el SEÑOR es testigo entre tú y yo para siempre.

  • 1 Samuel 20:24

    David se escondió en el campo. Y cuando llegó la luna nueva, el rey se sentó a la mesa para comer.

  • 1 Samuel 20:25

    Como solía, el rey se sentó en su silla, la silla junto a la pared. Jonatán se levantó, y Abner se sentó al lado de Saúl; pero el lugar de David quedó vacío.

  • 1 Samuel 20:26

    Aquel día Saúl no dijo nada, pues pensó: “Algo le habrá acontecido, y no está purificado. Seguramente no está purificado”.

  • 1 Samuel 20:27

    Pero sucedió que al día siguiente, el segundo día después de la luna nueva, el asiento de David quedó vacío, por lo que Saúl preguntó a su hijo Jonatán: — ¿Por qué no ha venido a comer el hijo de Isaí ni ayer ni hoy?

  • 1 Samuel 20:28

    Jonatán respondió a Saúl: — David me pidió encarecidamente que lo dejara ir a Belén.

  • 1 Samuel 20:29

    Él me dijo: “Por favor, déjame ir, porque los de mi familia tenemos un sacrificio en la ciudad, y mi hermano me lo ha ordenado. Por eso, si he hallado gracia ante tus ojos, permite que me vaya y visite a mis hermanos”. Por eso no ha venido a la mesa del rey.

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