• 1 Samuel 25:31

    entonces, señor mío, no será para ti motivo de remordimiento ni estorbo para la conciencia el haber derramado sangre en vano ni el que mi señor se haya vengado por sí mismo. Y cuando el SEÑOR haga el bien a mi señor, acuérdate de tu sierva.

  • 1 Samuel 25:32

    David dijo a Abigaíl: — ¡Bendito sea el SEÑOR Dios de Israel, que te envió hoy a mi encuentro!

  • 1 Samuel 25:33

    Bendito sea tu buen juicio, y bendita seas tú, que hoy me has impedido ir a derramar sangre y a vengarme por mi propia mano.

  • 1 Samuel 25:34

    No obstante, vive el SEÑOR Dios de Israel que me ha impedido hacerte daño; pues si no te hubieras apresurado a venir a mi encuentro, antes del amanecer no le habría quedado a Nabal ni un solo hombre con vida.

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