• 2 Reyes 9:34

    Luego entró, y después que comió y bebió, dijo: — Ocúpense de esa maldita y sepúltenla, pues es hija de rey.

  • 2 Reyes 9:35

    Pero cuando fueron para sepultarla, no hallaron de ella más que el cráneo, los pies y las palmas de las manos.

Continúa después de la publicidad