• 2 Timoteo 1:12

    Por esta razón padezco estas cosas, pero no me avergüenzo porque yo sé a quién he creído, y estoy convencido de que él es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.

  • 2 Timoteo 1:13

    Ten presente el modelo de las sanas palabras que has oído de mí, en la fe y el amor en Cristo Jesús.

  • 2 Timoteo 1:14

    Guarda el buen depósito por medio del Espíritu Santo que habita en nosotros.

  • 2 Timoteo 1:15

    Ya sabes que se apartaron de mí todos los de Asia, entre ellos Figelo y Hermógenes.

  • 2 Timoteo 1:16

    El Señor conceda misericordia a la casa de Onesíforo porque muchas veces me reanimó y no se avergonzó de mis cadenas.

  • 2 Timoteo 1:17

    Más bien, cuando estuvo en Roma, me buscó solícitamente y me halló.

  • 2 Timoteo 1:18

    El Señor le conceda que halle misericordia de parte del Señor en aquel día. Cuánto nos ayudó en Éfeso tú lo sabes muy bien.

Continúa después de la publicidad