Y tan pronto como ella los vio con sus ojos, se enamoró de ellos y les envió mensajeros a Caldea.

Les envió mensajeros a Caldea. Fue ella la que solicitó a los caldeos, no ellos a ella. Probablemente la ocasión fue cuando Judá buscó fortalecerse mediante una alianza caldea contra un ataque amenazado por parte de Egipto (cf.; 2 Reyes 24:1 ).

Dios hizo del objeto de su deseo pecaminoso el instrumento de su castigo. Joacim probablemente por una estipulación de tributo, alistó a Nabucodonosor contra Faraón, de quien había sido tributario anteriormente: al no cumplir con su estipulación, atrajo sobre sí mismo la venganza de Nabucodonosor.

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