Las palabras agradables son como un panal de miel, dulces al alma y medicina para los huesos.

Las palabras agradables (son como) un panal de miel, dulce para el alma y salud para los huesos. Las "palabras agradables" son "palabras de los puros". El "panal de abeja" se utilizaba con fines medicinales, así como para el disfrute. Aquella miel que brota del panal por sí sola, y no exprimida, es la más delicada, preciosa y apetecible.

Los huesos son, por así decirlo, los cimientos del cuerpo. El cuerpo y la mente se compadecen. Lo que es saludable para el alma hace bien al cuerpo al mismo tiempo.

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