Como la puerta gira sobre sus goznes, así gira el perezoso sobre su lecho.

Como la puerta gira sobre sus goznes, así (hace) el perezoso sobre su cama. Como la puerta se mueve alrededor del mismo centro, y no se puede separar de él. Se mueve, sí, pero no avanza. Así el perezoso yace ahora de este lado, ahora del otro, pero no será arrancado de su cama.

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