Para que guardes la discreción, y tus labios guarden la sabiduría.

Para que consideres la discreción, y (que) tus labios puedan guardar el conocimiento, para que tus labios puedan tener una respuesta discreta e inteligente para dar a las tentaciones del placer; como, por ejemplo, a los de la "mujer extraña".

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad