Maldito. Esta maldición cae sobre la serpiente natural, como instrumento del diablo; quien también es maldito al mismo tiempo por el Espíritu Santo. Lo que era natural para la serpiente y para el hombre en un estado de inocencia (como arrastrarse, etc., someterse al dominio del marido, etc.) se convierte en un castigo después de la caída. (San Crisóstomo) --- No había enemistad, antes, entre el hombre y ninguna de las criaturas de Dios; ni le hicieron daño. (Tirinus) --- El diablo parece ahora gatear, porque ya no aspira a Dios y las cosas celestiales, sino que apunta a la maldad y al engaño mezquino. (Menochius)

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