Sí, aunque vivió mil años contados dos veces, más del doble que los patriarcas más antiguos desde Adán hasta Noé, no ha visto nada bueno, su propia codicia lúgubre le priva de cualquier verdadero disfrute de la vida; ¿No van todos a un mismo lugar? porque el reino de los muertos está destinado a recibir a todos los hombres sin excepción.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad