Y vendrán contra ti con carros, carros y ruedas, carros de batalla armados con guadañas, cuyo tamaño las hizo doblemente formidables, y con una asamblea de personas, tropas de las diversas provincias y países bajo el dominio de Babilonia, que pondrá contra ti escudo y escudo y yelmo en derredor, empleando todas las armas de guerra para lograr sus fines; y pondré ante ellos juicio, nombrándolos para que ejecuten su sentencia de castigo, y ellos te juzgarán según sus juicios, que, de acuerdo con sus ideas paganas, fueron bárbaramente severos.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad