Está Edom, o Idumea, el país al sur del Mar Muerto, que se extiende hasta el Golfo Elanítico, sus reyes y todos sus príncipes, que con su poder, a pesar de todo su coraje e intrepidez, son colocados por los que fueron asesinados por la espada, también incluida en el castigo del Señor sobre todas las naciones impías; yacerán con los incircuncisos y con los que descienden a la fosa.

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