Después de muchos días serás visitado, buscado por el Señor para llevar a cabo Su juicio; en los últimos años entrarás en la tierra que es rescatada de la espada, librada de la guerra y de la destrucción, y reunida de entre muchos pueblos, rescatada del destierro, contra los montes de Israel, que siempre han sido desolados. que fueron para una devastación perpetua; pero ha salido de las naciones, y todos ellos habitarán seguros.

Esta declaración claramente apunta más allá del exilio en Babilonia e incluso más allá de la destrucción de Jerusalén por los romanos: el recogimiento de Israel es el de los hijos espirituales del Señor, y las huestes reunidas contra ellos son los enemigos de los últimos días de la Iglesia en la tierra, en en cuyo seno los creyentes estarán a salvo y seguros.

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