Como muchos se asombraron de ti, llenos de asombro y aversión; Su rostro estaba tan desfigurado, más que el de cualquier hombre, y Su forma más que la de los hijos de los hombres, es decir, Su apariencia entera había sido tan desfigurada por la extremadodad de los sufrimientos a los que fue sometido que era casi incomprensible cómo un el ser humano podría soportar tal exceso de miseria;

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