Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Ellos, es decir, los invasores cuya llegada fue profetizada aquí, rebuscarán por completo el remanente de Israel como una vid, no apresuradamente ni superficialmente, sino con la mayor minuciosidad, como siempre se ejecuta el juicio divino. Vuelve tu mano como un recolector de uva a los cestos, volviendo una y otra vez a las viñas para conseguir hasta la última de las bayas, dicho de las repetidas invasiones de los caldeos, en cada una de las cuales se llevaron cautivos a Babilonia.

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