Oh Señor, Dios de los ejércitos, poderoso Gobernador de los ejércitos del cielo, ¿ quién es un Señor fuerte como tú, el único que posee y ejerce un poder omnipotente, o para tu fidelidad en torno a ti? Porque es en virtud de esta manifestación de Su esencia que los creyentes confían en Su Palabra con absoluta confianza; lo rodea por todos lados, es como los rayos del sol derramando su brillo en todas direcciones. Ahora se describe la majestad de la omnipotencia de Dios.

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