Hay agonía en esta canción. El cantante está acosado por los enemigos. Están luchando con él, luchando contra él. Están conspirando contra él, extendiendo traidoramente una red para sus pies. Clama a Jehová por ayuda, prometiendo que ofrecerá alabanza por su liberación (versículos 35: 1-10). El cantante toca profundidades más profundas. La crueldad y la opresión están siendo mostradas por aquellos con quienes en el pasado se ha hecho amigo. En su momento de angustia había llorado con ellos. En el día de su detención se han aprovechado de la debilidad, aún más para herir.

Nuevamente clamó al Señor pidiéndole que lo salvara y prometió alabarlo públicamente (versículos 35: 11-18). Y nuevamente se ofrece la misma oración. Los enemigos no solo son crueles y traicioneros, están llenos de amargura y se burlan y se burlan del hombre que sufre. En su agonía clamó por ayuda, por tercera vez prometiendo alabarlo (versículos 35: 19-28).

Antes de criticar al cantante por su actitud hacia sus enemigos, imaginemos que estamos en su lugar. En ningún sentido el nivel de realización espiritual en este salmo es igual al de muchos otros. Uno de los mayores valores de la colección es su revelación de cómo, en todas las circunstancias, el alma puede volverse a Dios.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad