" Y los amorreos echaron a los hijos de Dan a la región montañosa, porque no les permitían bajar al valle".

Estos amorreos eran un grupo fuerte que ocupaba, (pero no únicamente), una extensa tierra. Desafortunadamente para Dan, estaban en el territorio de Dan alrededor de Aijalon y resistieron todos los intentos de Dan de expulsarlos. Dan pudo ocupar la región montañosa, pero no las llanuras fructíferas. Al parecer, había pocos cananeos o amorreos en esas colinas, lo que sugiere que las condiciones de vida allí eran difíciles. Las tierras asignadas a Dan fueron fructíferas, pero por esa misma razón estaban bien pobladas.

Como sabemos en otros lugares, su fe en Yahvé era tan débil que fueron desobedientes y muchos de ellos abandonaron el territorio y se hicieron un nuevo hogar con su propia religión sincrética ( Jueces 18 ). De ahí aprendemos de su inclinación hacia la idolatría.

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