Salmo 4:1-8

Salmo 4 I.En todas partes, en la historia del corazón humano, estas dos cosas se encuentran en las horas de nuestro amargo dolor: el deseo insondable y la falta de algo más de lo que la tierra o su amor puede dar, y la conciencia de alguien capaz de llenar el querer. De estas dos cosas, la concienc... [ Seguir leyendo ]

Salmo 4:4

Salmo 4:4 _(con Salmo 24:3 )_ Este texto se dirige a toda persona solitaria, en el momento más solitario y silencioso, cuando termina su jornada laboral y se va a dormir. David no podría habernos dicho una palabra mejor a ninguno de nosotros que esta: "Comulga con su propio corazón en su cama, y ​... [ Seguir leyendo ]

Salmo 4:4,5

Salmo 4:4 Para las personas abatidas y que dudan de cuál es su esperanza de perdón, santificación y aceptación final, la respuesta divina no es nada mística ni desconcertante, nada implica que nuestra condición no sea de peligro y dificultad, ni tampoco nada que pueda suceder. disculpen los sentimi... [ Seguir leyendo ]

Salmo 4:6

Salmo 4:6 I. Considere, primero, la pregunta: "Hay muchos que dicen: ¿Quién nos mostrará el bien?" Ahora bien, sean quienes sean estas personas, se desprende claramente del lenguaje que se les atribuye que no son felices. Hablan como hombres que han gastado su dinero y han descubierto que lo que ha... [ Seguir leyendo ]

Salmo 4:6,7

Salmo 4:6 I. Mira, primero, lo que busca el salmista: la luz del rostro de Dios. (1) Lo primero que esto implica es que somos notados por el Ser Divino. El semblante de Dios al menos significa esto, que Él toma conocimiento de nuestros asuntos. (2) Significa que Él está interesado en nosotros. La m... [ Seguir leyendo ]

Salmo 4:8

Salmo 4:8 Todo el descanso y la tranquilidad de los fieles siervos de Dios, cuando los acuestan en su cama por la noche, está bellamente expresado en las palabras del texto. "Me acostaré", dice David, " _todos juntos"_ todas mis facultades mentales y corporales, por así decirlo, concordando entre s... [ Seguir leyendo ]

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