Y corrió hacia Elí y dijo: Aquí estoy; porque tú me llamaste. Y él dijo: No llamé; Acuéstate de nuevo. Y él fue y se acostó.

Ver. 5. Y corrió hacia Elí. ] Esto demuestra su diligencia en atender a su amo ciego, aunque ahora solo tenía doce años, como dice Josefo.

Y él fue y se acostó, ] sc., Para dormir; lo cual no habría hecho si hubiera pensado que el Señor le había hablado. Entonces, si los hombres consideraran que es Dios quien les habla por boca de sus ministros, escucharían y prestarían atención mucho mejor.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad