Hiram dijo además: Bendito sea el SEÑOR Dios de Israel, que hizo los cielos y la tierra, que dio al rey David un hijo sabio, dotado de prudencia y entendimiento, que edificaría una casa para el SEÑOR, y una casa para su reino.

Ver. 12. Bendito sea el Señor Dios de Israel, que hizo el cielo y la tierra. ] Egregia est confessio. Aristóteles sostuvo la eternidad del mundo.

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