Y subieron a Judá, y penetraron en ella, y se llevaron todo el dinero que había en la casa del rey, y también sus hijos y sus mujeres; de modo que nunca le quedó un hijo, salvo Joacaz, el menor de sus hijos.

Ver. 17. Y se llevó toda la sustancia. ] Saquearon también la ciudad principal y el palacio del rey. Jerusalén, después de convertirse en idólatra, fue tomada diez veces: Roma, desde que se convirtió en Papal, nunca fue sitiada, pero también fue tomada y saqueada. Se dice que esta palabra pillaje, de la que oímos por primera vez en las guerras suecas, proviene de planum dare, nivelar o planear todo hasta la nada; o de los holandeses, como si fuera a pelar o arrancar las plumas de un pájaro hasta la piel desnuda.

Y sus hijos también. ] A quien mataron. 2 Crónicas 22: 1

Y sus esposas. ] Atalía escapó, por un daño público.

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