Y ellos le respondieron: [Era] un hombre velludo, y ceñido con un cinto de cuero alrededor de sus lomos. Y él dijo: Es Elías el tisbita.

Ver. 8. Era un hombre peludo. ] Hispidus et hirsutus. Ya sea porque Elías tenía mucho cabello en la cabeza y el rostro, o porque, como profeta, vestía un vestido tosco, Zacarías 13: 4 como modelo de arrepentimiento.

Y ceñido con un cinto de cuero. ] También lo era Juan Bautista, el segundo Elías. Que este cinto aquí mencionado fue hecho con la piel de ese carnero que ofreció Abraham en lugar de su hijo Isaac, es una fábula judía, poco digna de ser contada.

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