Envió, pues, caballos, carros y un gran ejército; y vinieron de noche y rodearon la ciudad.

Ver. 14. Por tanto, envió caballos y carros. ] Para hacer la guerra contra Dios mismo, cuyo poder debe contemplar en este su profeta; y, sin embargo, no teme, como un gigante, oponerse a él. Vea lo que hizo Ocozías, 2Re 1: 1-17, y sepa que así como había muchos Marii en un César, también hay muchos Benhadads y Ocozías en el mejor de los casos por naturaleza. Todos somos Theomachi, luchadores contra Dios.

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