Y [había] de la casa de Saúl un siervo que se llamaba Siba. Y cuando lo llamaron a David, el rey le dijo: ¿Eres tú Siba? Y él dijo: Tu siervo [es].

Ver. 2. Un sirviente cuyo nombre era Ziba. ] Un viejo lisonjero, como Saúl tenía muchos a su alrededor; Qualis herus, tolis servus.

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