También me apartaré de ellos mi rostro, y profanarán mi [lugar] secreto; porque los ladrones entrarán en él y lo profanarán.

Ver. 22. Mi rostro también me apartaré de ellos. ] De los caldeos, para que se despojen a su gusto; o de los israelitas, para que perezcan sin ayuda.

Y contaminarán mi lugar secreto. ] Incluso el Lugar Santísimo, donde nadie podía entrar sino el sumo sacerdote una vez al año; sin embargo, además de estos ladrones babilónicos, lo hicieron Heliodoro y Pompeyo; pero uno se volvió loco y el otro nunca prosperó después de él.

Porque los ladrones entrarán en ella. ] Effractores; con este nombre, hacedores de brechas, los judíos en este día denominan a nuestros nobles y grandes.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad