Y vivió Matusalén, después que engendró a Lamec, setecientos ochenta y dos años, y engendró hijos e hijas.

Ver. 26. Y Matusalén vivió. ] Pero tuvo la menor alegría de su vida más larga, porque vivió en la misma herrumbre de esa edad de hierro; y así sintió la ultima senescentis mundi deliria , los más extremos de ese viejo y decrépito mundo.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad