Cortaron mi vida en la mazmorra y arrojaron una piedra sobre mí.

Ver. 53. Han cortado mi vida en el calabozo. ] Donde llevé una vida sin vida; como Roger, obispo de Salisbury, en la época del rey Esteban, que sufrió tales miserias en la cárcel, ut vivere noluerit, mori nescierit, que no viviría y, sin embargo, no pudo morir.

Y arroja una piedra sobre mí. ] Como lo hicieron en la boca de las guaridas, mazmorras o sepulcros, para asegurarse el trabajo. El caldeo lo tiene, me apedrearon.

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