Montañas y todas las colinas; árboles frutales y todos los cedros:

Ver. 9. Montañas y todas las colinas ] Estos alaban a Dios por su forma, inmensidad, frutos, perspectivas, etc.

Árboles fructíferos ] Estos, por la variedad de sus naturalezas y frutos, destacan notablemente la sabiduría, el poder y la bondad del Todopoderoso; mientras gastan ellos mismos y la mayor parte de su savia y humedad en producir alguna baya agradable, o algo parecido, para el uso del hombre, que de ese modo se dedica a bendecir a Dios.

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