16-22 Moisés encontró refugio en Madián. Estaba dispuesto a ayudar a las hijas de Reuel a dar de beber a sus rebaños, aunque había sido educado en la sabiduría y en la corte. A Moisés le gustaba administrar justicia y defender a aquellos que veía que eran perjudicados, lo cual todo hombre debe hacer en la medida de sus posibilidades. Le gustaba hacer el bien; dondequiera que la providencia de Dios nos arroje, debemos desear y tratar de ser útiles; y cuando no podemos hacer el bien que quisiéramos, debemos estar dispuestos a hacer el bien que podamos. Moisés se ganó el favor del príncipe de Madián, quien casó a una de sus hijas con Moisés, con quien tuvo un hijo llamado Gershom, "un extranjero allí", para que recordara la tierra en la que había sido extranjero.

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