Ireneo contra las herejías Libro IV

Y por eso dijo el Señor a sus discípulos, para hacernos buenos obreros: Mirad por vosotros mismos, y velad continuamente en toda ocasión, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez, y de los afanes de esta vida, y aquel día os llegará de improviso, porque como un lazo caerá sobre todos los moradores de la faz de la tierra»[565].

Ireneo contra las herejías Libro IV

Y: "Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes mundanos"[600].

Tertuliano contra Marción Libro IV

Que también los discípulos sean advertidos, "para que sus corazones no se carguen con la glotonería y la embriaguez y los afanes de este mundo, y venga de repente sobre ellos aquel día como un lazo"[1579].

Discurso de Metodio V. Thallousa

Y por lo tanto, se ordena que una virgen no pruebe de esta vid, para que pueda estar sobria y vigilante de las preocupaciones de la vida, y pueda encender la antorcha brillante de la luz de la justicia para la Palabra. "Mirad por vosotros mismos", dice el Señor,[19]

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