El curso que lleva a la destrucción

-- Oseas Doce --

El camino del abandono de Dios conduce siempre a una destrucción segura y cierta. Efraín abandonó a Dios y buscó la alianza de naciones idólatras. Tal camino solo podría conducir a la destrucción. Dios había sido tan bueno con el hombre que llamó Israel y más tarde con la nación que llevó ese nombre. Sin embargo, la nación se volvió deshonesta y engañosa. Oseas describió en términos muy comprensibles cuán poco rentable se había convertido Israel y la desolación que acompañaría sus elecciones y acciones.

Los hijos de Israel perderían sus posesiones como resultado de su rebelión contra Dios. Dios dijo: "Yo, que soy el SEÑOR tu Dios desde la tierra de Egipto, todavía te haré habitar en tabernáculos, como en los días de la fiesta solemne". ( Oseas 12:9 ) Dios les había provisto muchas oportunidades de instrucción y arrepentimiento para Israel, pero ellos rehusaron. Él dijo: "También he hablado por los profetas, y he multiplicado visiones, y usado semejanzas, por el ministerio de los profetas.

( Oseas 12:10 ) Dios levantó a este pueblo de un comienzo muy humilde para convertirse en una nación fuerte. Los juicios divinos estaban a punto de caer sobre Israel. su afrenta le volverá su Señor.” ( Oseas 12:14 )

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