XIII. CONCLUSIÓN

A. Y cerraremos con el deseo del Señor para Israel y dentro de este versículo también está Su deseo para todos sus hijos.

1. Oseas 14:1-9 (LBLA) Vuélvete, oh Israel, al Señor tu Dios, porque has tropezado a causa de tu iniquidad.

2 Lleva contigo las palabras y vuélvete al Señor. Dile: Quita toda iniquidad, Y recíbenos con misericordia, Para que presentemos el fruto de nuestros labios.

3 "Asiria no nos salvará, no montaremos a caballo, ni diremos más: 'Dios nuestro', a la obra de nuestras manos, porque en ti el huérfano hallará misericordia".

4 Sanaré su apostasía, Los amaré con generosidad, Porque mi ira se ha apartado de ellos.

5 Seré como el rocío para Israel; Florecerá como el lirio, Y echará raíces como [los cedros del] Líbano.

6 Sus retoños brotarán, y su hermosura será como la del olivo, y su fragancia como [los cedros del] Líbano.

7 Los que habitan a su sombra Volverán a dar grano, Y florecerán como la vid. Su renombre [será] como el vino del Líbano.

8 Oh Efraín, ¿qué más tengo yo que ver con los ídolos? Soy yo quien responde y te cuido. Soy como un ciprés frondoso; De Mí viene vuestro fruto.

9 El que es sabio, que entienda estas cosas; [Quien] tenga discernimiento, que las conozca. Porque los caminos del Señor son rectos, y los justos andarán por ellos, pero los transgresores tropezarán en ellos.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad

Antiguo Testamento

Nuevo Testamento