Un oficial judío se acercó a él. Uno de los ancianos de la sinagoga, funcionario que convocaba a la congregación, conservaba el orden, y que invitaba a los lectores y oradores. Marcos da su nombre como Jairo. Mateo, Marcos y Lucas dan esto. De ellos aprendemos que esta niña tenía doce años, que se estaba muriendo cuando él comenzó a ir a Jesús, y que murió mientras él hablaba.

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Antiguo Testamento