13. Y toda la tierra de Canaán se desmayó. Fue un juicio memorable de Dios, que las regiones más fértiles, que estaban acostumbradas a suministrar provisiones para naciones lejanas y transmarinas, se redujeron a tal pobreza que casi se consumieron. La palabra להה (lahah), que Moisés usa, se explica de dos maneras. Algunos dicen que fueron conducidos a la locura debido a la hambruna; otros, que estaban tan desprovistos de comida que se desmayaron; pero cualquiera que sea el método de interpretación que se apruebe, vemos que los que estaban acostumbrados a suministrar comida a otros, estaban hambrientos. Por lo tanto, no es para quienes cultivan tierras fértiles confiar en su abundancia; más bien déjelos reconocer que una gran provisión de provisiones no brota tanto de las entrañas de la tierra, sino que destila, o más bien desciende del cielo, por la secreta bendición de Dios. Porque no hay una exuberancia tan grande que no se cambie pronto por esterilidad, cuando Dios la rocíe con sal en lugar de lluvia. Mientras tanto, es correcto dirigir nuestros ojos a esa bondad especial de Dios por la cual él alimenta a su propio pueblo en medio de la hambruna, como se dice en Salmo 37:19. Sin embargo, si Dios se complace en probarnos con hambre, debemos rezar para que nos prepare para soportar el hambre con una mente mansa e igual, para que no nos enfurezcamos, como bestias salvajes feroces e incluso voraces. Y aunque es posible que surgieran conmociones graves durante la escasez prolongada (como se dice en el viejo proverbio que el vientre no tiene orejas), me parece que el sentido más simple del pasaje es que los egipcios y Los cananeos se habían hundido bajo la hambruna y estaban postrados, como si estuvieran a punto de morir. Además, Moisés persigue la historia de la hambruna, con la intención de mostrar que la predicción de José fue verificada por el evento; y que, por su habilidad e industria, los mayores peligros fueron tan bien y diestros contra los que Egipto debió reconocerlo justamente como el autor de su liberación.

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