El Profeta ahora concluye sus temas, que, como Dios ejecutó juicios tan severos sobre la gente, fue una maravilla que permanecieran estupefactos, cuando así se redujo a las extremidades. La vid, dice, se ha secado, y todo tipo de fruta; agrega la higuera, luego el רמון remun, la granada, (porque así lo hacen), la palma, el manzano, (4) y todos los árboles. Y esta esterilidad era un claro signo de la ira de Dios; y se habría considerado así, si los hombres no se hubieran engañado completamente a sí mismos, o se hubieran endurecido contra todos los castigos. Ahora esta αναὶσθησὶα (insensibilidad) es como si fuera la cumbre misma de los males; es decir, cuando los hombres no sienten sus propias calamidades, o al menos no entienden que son infligidos por la mano de Dios. Pasemos ahora -

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