9 Estos comeréis de todos los que están en las aguas. Aquí, también, algunos que saben poco de religión, sostienen plausiblemente que Dios está actuando como parte del médico y que está distinguiendo la comida sana de la comida no saludable. Pero aunque su opinión es suficientemente refutada por los médicos mismos, aun si admitiera lo que desean, razonan mal. El propósito de Dios era otro que proveer para la salud de las personas; y, debido a que tenía que ver con un pueblo grosero, eligió marcas comunes, siendo amonestado por el cual podrían ascender gradualmente a cosas más altas. Sería inútil seguir las alegorías que Isiquio ha inventado (44) y voluntariamente enterraría en el olvido estas tonterías, excepto que muchos tienen tanta inclinación a las sutilezas , que las opiniones sobrias apenas los complacerían, hasta que la locura de estas alegorías haya sido condenada. No diré nada de las escamas y las aletas. Si a primera vista alguno aprueba lo que dice sobre los nombres de los peces que se omiten, porque la Iglesia no busca. un nombre en la tierra, y que la Iglesia está representada por el pez, que consideren si es coherente que la Iglesia solo exista en el agua; y, nuevamente, que las aves, que están más cerca del cielo, deben ser excluidas de este honor; tercero, que los animales limpios sean rechazados, como si no pertenecieran a la Iglesia; por último, que quienes contaminen la Iglesia contaminen a los elegidos, cuyos nombres están escritos en el cielo; porque ciertamente muchos de los peces son inmundos. A aquellos que no consientan en estas perspicaces razones, les permitiré deambular en su laberinto. Esta visión simple satisfará a los moderados y enseñables, que los peces no se nombran, porque la mayor parte de ellos eran desconocidos para los judíos, cuyo país no producía muchos de los peces de río, ya que apenas tenía ningún río además del Jordán , mientras que los peces de mar solo visitaron las costas vecinas.

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