7. Entonces Jesús acercándose los tocó. Cristo los levanta cuando habían caído, y al hacerlo realiza su oficio; porque vino a nosotros con este mismo propósito, que con su guía los creyentes podrían entrar valientemente en la presencia de Dios, y que su majestad, que de otro modo se tragaría toda la carne, ya no podría llenarlos de terror. Tampoco es solo por sus palabras que él consuela, sino al tocar también que los alienta.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad