Por tanto, teniendo en cuenta que tenemos este ministerio. El ministerio del Nuevo Testamento, cuya excelencia se ha tratado en el capítulo anterior. A esto Dios en Su misericordia nos ha llamado, Sus indignos Apóstoles.

No nos desmayemos. No cedemos, no nos intimidan los peligros y las dificultades, no nos cansamos, como dice Erasmo.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad

Antiguo Testamento