Más literalmente, "déjame descansar, y déjame tocar los pilares, para que pueda apoyarme en ellos". Fingió cansancio con su baile y canto, y pidió recuperarse apoyándose en los pilares. La cubierta plana, desde la parte superior, así como debajo de ella, los espectadores podían ver lo que se hacía en el escenario de enfrente, estaba sostenida principalmente por dos pilares. Los señores y personas principales se sentaron BAJO el techo, mientras que el pueblo, en número de 3.000, se puso de pie SOBRE el techo plano.

Cuando se quitaron los pilares, el peso de 3.000 personas derribó el techo con un estruendo terrible, y los de arriba cayeron junto con las piedras y las vigas sobre los de abajo, y el resultado fue una gran matanza, y el propio Sansón pereció bajo las ruinas.

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