Ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra,

1. NO rezaron una oración de imprecación. No pidieron que estos hombres fueran destruidos o castigados de alguna manera.

2. NO oraron para que se quitaran las amenazas, o para que el peligro desapareciera.

3. SÍ oraron - por AUDAZ, para hablar la palabra de Dios.

4. Planeaban continuar "a pesar de" las amenazas.

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