orándonos con mucha súplica, ministrando a los santos ; según otra traducción más literal, Pidiéndonos con mucha súplica el don y la comunión de ministrar a los santos; es decir, pedirnos el privilegio de hacer el don, y así participar en el ministerio de los santos. Son los santos pobres de Jerusalén a los que se hace referencia. Romanos 15:26 ; 1 Corintios 16:3 .

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Antiguo Testamento