También del monte Efraín, de donde también estaba el levita, lo que lo inclinó a mostrar más bondad a su compatriota. Pero los hombres del lugar eran de Benjamín. Esta era una de las ciudades que pertenecían a los sacerdotes; pero las ciudades que fueron dadas a los sacerdotes, y de las cuales eran propietarios, no estaban habitadas solamente por sacerdotes o levitas, especialmente en este tiempo, cuando eran pocos en número, sino por muchas otras personas de diferentes profesiones.

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