El Señor dará fuerza a su pueblo para sostenerlo y preservarlo en las más terribles tormentas y conmociones, ya sea de la tierra o de sus habitantes; y, en consecuencia, en todos los demás peligros y contra todos sus enemigos. Él los fortalecerá y fortalecerá contra toda obra mala, y los proveerá para toda buena obra: de la debilidad serán fortalecidos; es más, perfeccionará la fuerza en su debilidad. Bendecirá a su pueblo con paz, aunque ahora considera conveniente ejercitarlos con algunos problemas. Él los animará en su servicio y les dará a descubrir por experiencia que la obra de la justicia es paz , y que gran paz tienen los que aman su ley y andan de acuerdo con ella.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad