Y Moisés hizo lo que el Señor le mandó, etc. — Aarón y sus hijos son consagrados. El pueblo es llamado a la puerta del tabernáculo para agraciar la solemnidad y con sus oraciones para implorar la bendición divina. Moisés, según las instrucciones de Dios, procede a la consagración: primero los lava. Aquellos que han de predicar la eficacia de la sangre de Cristo deben primero ser lavados ellos mismos por ella, y mostrar con sus propios ejemplos la pureza que enseñan. Aarón se viste con las vestiduras hermosas y la diadema, y ​​se unge con el aceite santo, como también el tabernáculo y todos los utensilios del santuario.

Nota: 1. A todo creyente en Jesús se le han provisto ropas más brillantes, vestiduras de justicia eterna y coronas de gloria que nunca se desvanecen. 2. El aceite corría desde la cabeza del sumo sacerdote hasta el borde de su ropa: los dones y las gracias del Espíritu Santo, con los que nuestro gran Sumo Sacerdote fue ungido, descienden a cada miembro de su cuerpo místico, que tiene una unción. del Santo.

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