Él cortará, etc.— Al que corta, o derriba, etc. El espíritu significa el orgullo y la euforia de la mente; como el del rey de Asiria, antes de ser obligado a regresar con vergüenza de cara a su propia tierra.

REFLEXIONES.— La iglesia de Dios a menudo es obligada a cantar sus canciones triunfales, incluso aquí abajo.

1. Dios es representado aquí eminentemente apareciendo para ella. En Judá se conoce a Dios; allí había hecho la revelación más gloriosa de sí mismo y de su voluntad: su nombre es grande en Israel, exaltado y alabado por su pueblo, y engrandecido en las maravillas que había hecho a favor de ellos. También en Salem está su tabernáculo, y su morada en Sion; favorecido con su presencia inmediata, visible en la Shecinah de gloria.

Y esto puede referirse a la encarnación del Hijo de Dios, dado a conocer en Judá por la predicación del Bautista, como el exaltado Salvador de Israel, quien plantó su tabernáculo entre los hombres, apareció en la carne en Jerusalén; y en su iglesia, la Sión espiritual, continúa estableciendo su morada.

2. Se obtiene una victoria gloriosa, ya sea por David, por Josafat, por Ezequías, o por el Señor Jesucristo, a quien enfáticamente se le puede aplicar, sobre los poderes del pecado, Satanás, la muerte y el infierno. Los enemigos son representados como valientes, como hombres poderosos, como completamente armados. Pero no hay contienda contra Dios; rotas las flechas, el escudo, la espada y la batalla:incapaces de defenderse, los valientes han caído con sus carros y caballos; duermen el sueño de la muerte, y los débiles se llevan el botín.

Así nuestro Redentor ha despojado de los principados y potestades; y, siguiéndole, el creyente más débil se apodera de la presa y triunfa sobre los enemigos vencidos; porque todos los enemigos de la iglesia y el pueblo de Cristo, por muchos o poderosos que sean, serán desarraigados al final.

3. Todo se le atribuye a Dios solamente, suya es la obra, para él debe ser la alabanza. No por nuestra fuerza o poder, sino por tu reprensión, oh Dios, son derribados. Más glorioso y excelente eres tú que los montes de presa; los reyes tiránicos y todos los poderes perseguidores no son nada en manos de su omnipotencia; cuanto más elevados sean ellos, más glorificado será él en su humillación; porque todo monte será abatido. Nota; En todos los peligros a los que está expuesto el pueblo de Dios, deben mirar al poder glorioso de Dios, comprometido para ellos, y no tener miedo.

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